La contadora pública de York capacita a sus clientes para que tomen el control de su futuro financiero

El hijo de Grace Quartey nunca tuvo que apuntarse a la educación vial en el instituto; se le inscribió automáticamente. Le gustaría que ocurriera lo mismo con las clases de negocios o de gestión financiera.

“Uno sale del instituto sin saber nada de impuestos”, dice.

Hoy en día, Grace trabaja con personas de todo tipo para ayudarles a entender sus finanzas y a tomar decisiones informadas sobre su futuro. Por eso fundó Grace & Associates hace casi 20 años.

“Aunque la gente se preocupa por las finanzas todo el tiempo, puede ser abrumador”, dice. “La mayoría de la gente opta por meter la cabeza en la arena en lugar de afrontarlo”.

Junto con la presentación de impuestos para sus clientes, Grace les ayuda a entender por qué obtienen ciertos créditos o reembolsos y les ayuda a crear un presupuesto para priorizar lo que es importante.

“Ayudar a la gente a navegar por sus finanzas y darles poder – es muy satisfactorio”, dice. “El conocimiento es poder. Cuando tienes conocimientos, creas confianza y sabes cómo navegar por este mundo”.

Llegar a la cima

Cuando Grace y su marido se mudaron a York en 1999, ella no pudo encontrar un trabajo como contable.

Tras dos años de aprendizaje en un banco de inversión como consultora financiera, se lanzó a la aventura por su cuenta.

“Naturalmente, soy una buscavidas”, dice. “Si no lo encuentro, lo creo”.

Construyó su clientela gracias al boca a boca, dando charlas en lugares como la YWCA de York y las iglesias de la zona, enseñando a la gente a entender y tomar el control de sus finanzas.

“Podía hacer lo que hacía y ser capaz de empoderar a las mujeres de una manera integral”, dice. “No se trata sólo de inversiones financieras o sólo de impuestos, sino de ayudar a la gente a ver el panorama completo”.

Soltar el acelerador

Grace, una mujer negra de Ghana, se ha enfrentado a muchas dificultades para crear un negocio. Ahora, sin embargo, se enfrenta a un nuevo reto: levantar el pie del acelerador.

“Estoy en un punto en el que puedo asociarme con otras personas y organizaciones para centrarme en un trabajo que amplíe las oportunidades y enseñar a otros a pescar en lugar de darles pescado”, dice Grace.

Ha creado una base de clientes fieles y puede centrarse en su trabajo voluntario y sin ánimo de lucro mientras busca nuevas oportunidades.

“No siempre se trata de dinero. Hay que aprender a ahorrar y a prepararse para no estar siempre en apuros”, dice Grace. “Eso es lo que enseño: Trabajar duro y saber cuándo aflojar”.