Muhly & Cedar, en Shrewsbury, sale de la pandemia

Jen Lubman publica una foto en su cuenta de Instagram casi todos los días. En esta época del año, los rojos y naranjas brillantes de los árboles, acompañados de las hierbas y flores secas, llenan el marco.

Su patio personal parece algo que se vería en los Jardines de Longwood, aunque ella vive en apenas media hectárea.

“Quiero que la gente entienda que no hace falta estar forrado para tener un bonito espacio exterior”, dice Jen, que ha trabajado en botánica y horticultura durante más de 30 años. “La gente cree que las plantas y el paisajismo son para gente adinerada, y yo no estoy de acuerdo con eso”.

Jen abrió su tienda, Muhly & Cedar, en el 15 N. Main St. de Shrewsbury a finales de 2020, cuando la pandemia puso de moda las plantas de interior y la mejora de los paisajes domésticos se convirtió en una nueva afición para muchos.

“Fue extraño empezar en la pandemia, cuando había muchas incógnitas, pero sentí que si no hubiera aprovechado la oportunidad, se me habría escapado de las manos”, dice. “Confío en mi propia valentía. Si siento que debo esforzarme por hacerlo, lo haré.”

El salto al emprendimiento

Jen ha desempeñado muchas funciones a lo largo de su carrera, pero su favorita fue la de encargada del vivero del Centro de Jardinería John Shelley en Felton. Allí conoció algunas de las plantas más diversas que jamás había visto.

Más tarde trabajó durante ocho años para la Administración de Carreteras de Maryland, supervisando a los contratistas que plantaban materiales a lo largo de las carreteras.

Además, vendía plantas, macetas y decoraciones navideñas dos días a la semana en Tumbleweeds, en Glen Rock.

Cuando la despidieron de su trabajo en el gobierno en 2018, encontró el impulso que necesitaba para tomar su negocio paralelo y convertirlo en su carrera.

Un negocio en auge

El trabajo de Jen puede verse en todo el sur del condado de York. Realiza diseños de contenedores en los negocios de la zona cuando la tienda está cerrada, y luego recibe a los invitados en sus clases de plantas, el bar de flores secas y la tienda de regalos de jardinería el resto de la semana.

También realiza visitas guiadas a su casa y visita diferentes instalaciones, como el Shrewsbury Lutheran Village y otros clubes de jardinería, para impartir talleres y dar charlas.

A diferencia de algunos negocios basados en plantas, Muhly & Cedar está abierto todo el año, sobre todo porque todavía tiene que “pagar la hipoteca”.

Pero todo el trabajo que hace, aunque sea físico y sucio, es lo que le gusta. El riesgo que corrió al poner en marcha su negocio ha merecido la pena, y a veces tiene que pellizcarse de que, un año después, su tienda siga prosperando.

“A lo largo de los años he conocido a gente que conoce mi trabajo y sabe que entiendo de plantas”, dice. “Ellos son los que vienen aquí y apoyan de verdad lo que hago”.